Desde hace unos años, ese estrés producido por la incorporación al trabajo tras las vacaciones se suele llamar "síndrome de estrés postvacacional", un síndrome que no existe, ni está catalogado ni reconocido por la OMS como explicaba con mucho acierto mi colega Leocadio Martín cuando le entrevistaban recientemente al respecto. Aparece porque tenemos una tendencia a psicopatologizar la vida cotidiana.
Si lo pensamos bien, cualquier cambio laboral o en nuestra vida nos genera estrés, que requiere de un periodo de adaptación. Por ejemplo, cuando coges vacaciones y empiezas a pensar en dónde vas a ir, en que quiere ir la familia extensa y no sabes cómo decirles que no, en que los hoteles están caros, las maletas del día antes de viajar, el largo viaje hacia tu lugar de descanso, organizarlo todo al llegar. Todo eso también puede generarnos estrés. Que será mayor o menor dependiendo de tu capacidad de adaptación.
Nuestra mente es perezosa y no le gustan los cambios.
Recientemente la psicóloga Cristina Andrades comentaba en twitter esa peligrosa tendencia a idealizar tu vida en redes sociales, en especial en vacaciones. Decimos cosas como: "Esto es vida"… Como si trabajar fuera la muerte!! Y no es así.
En primer lugar, teniendo en cuenta la situación laboral del país, hay que estar agradecido por tener trabajo hoy en día. Además, hay personas a las que les gusta su trabajo y es su pasión o lo que se le da realmente bien. A otros no les gusta pero se adaptan y saben que es algo importante.
Si solo organizas y disfrutas de tu vida de vacaciones en vacaciones, entonces debes cambiar tu estilo de vida.
El trabajo cumple funciones no sólo relacionadas con la obtención de un salario, sino en muchos casos con el desarrollo profesional y personal, las relaciones sociales y otras.
De todos modos, la incorporación al trabajo después de este periodo de descanso suele costar un poco a la mayoría. Por eso a continuación te dejo algunas estrategias para la vuelta al trabajo.
¿Cómo hacer para adaptarte mejor a la vuelta al trabajo?
- Incorpórate progresivamente. Después de estar desconectado del trabajo, volver a tu cada varios días antes de tu incorporación. Ir madrugando más o acostarte antes.En profesiones liberales, con autonomía, procura llegar algún día antes para organizarlo todo. Ir por las mañanas al principio y luego a tope.
- Haz algo nuevo y conéctalo a la vuelta del trabajo. Apúntate a clases de baile, natación...
- Piensa en lo bueno: Tengo trabajo. Voy a ver a las compañeras, y vamos a hablar de las vacaciones, además volvemos a la tertulia de después del trabajo...
- Ten paciencia. Es normal que te cueste un poco los primeros días o primeras semanas, pero volverás al ritmo normal.
- Recupera tu estilo de vida. Esas cosas que hacemos cada día y nos provocan bienestar (deporte, alimentación, relaciones sociales, leer libros, ver series). Y si no te gusta, incorpora cambios en tus hábitos diarios. ¡¡No dejes lo bueno de la vida sólo para las vacaciones!!
Para terminar os dejo la noticia que apareció el pasado domingo en los informativos de Canal Extremadura, en la que me entrevistaron acerca de este síndrome y cómo afrontar la vuelta al trabajo tras las vacaciones. Informativos Canal Extremadura 3 septiembre 2017.